OPORTO, LA CIUDAD DE LOS PUENTES
PORTADA | Hay ciudades que atrapan nada más pisarlas. Que te abrazan, se retuercen y notas como se reinventan con el arte, el diseño y se convierten en las más modernas del planeta de la noche al día. Así es Oporto, la ciudad que da nombre al famoso vino portugués y que lleva en los listados de “imperdibles” desde hace un lustro.
¿Y cómo es ella? Oporto sabe a Duero, huele a Duero. El río que la besa y su famoso puente (aunque hay 5 más) separan el margen bodeguero de Vilanova de Gaia de la ciudad de Oporto. Es en este lado donde se encuentran todos los atractivos sin graduación: La Torre Dos Clérigos y sus 200 escalones para alcanzar una de las mejores vistas de la ciudad, el centro histórico Patrimonio de la Humanidad, la Ribeira con sus alicatadas fachadas y sus concurridas terrazas a pocos metros del Duero, el museo de arte contemporáneo de la Fundación de Serralves y la librería más visitada del mundo: Lello e Irmao, la que asocian a Harry Potter y en la que nunca estuvo. Cosas del “mitomanismo” viajero. Para ser más terrenales, subamos la graduación con una visita a bodegas como Sandeman, y que caiga la noche. Empieza lo bueno.
Articulo publicado en la revista URBAN ( de Levante-EMV)