UN ESPAÑOL POR EL MUNDO

EL VIAJERO | Luis Calero es uno de los reporteros del programa “Españoles en el mundo” desde sus inicios. Este valenciano de 31 años ha recorrido en poco más de dos años 21 países, acercándonos la historia de aquellos españoles que un día se aventuraron a empezar una vida lejos de su tierra. Luis nos acerca hoy la suya propia: de profesión, un español por el mundo.

Luis Calero durante la grabación de "Españoles en el Mundo".
Luis Calero durante la grabación de «Españoles en el Mundo».

-Supongo que serás consciente de que eres una de las personas más envidiadas de España, por el trabajo que tienes.

De hecho la frase más escuchada cuando digo donde trabajo es “que cabrón”. Es un clásico en todas las reuniones. Pero todo tiene su letra pequeña, sus horarios, la imposibilidad de llevar una vida normal. Del equipo que empezamos todos continuamos, lo cual es buena señal, porque hay sitios que en la vida hubiera conocido si no fuera por mi trabajo.

-¿Cuándo empezaste y cuántos países has visitado desde que empezaste en tu trabajo?

21 países en 2 años. El primero fue Haití y el último Costa Rica. No llega a uno al mes. Haití, Estambul, Serbia, Nueva Zelanda, Peru, Dinamarca, Vietnam, París, Estocolmo, Bali, Camerún, Uganda, Bombay, El Cairo, Moscú, Groenlandia, Filipinas, Budapest y Costa Rica. 

Antes eras tan viajero.

Sí, la verdad es que sí, primero por familia porque con mis padres viajé por toda Europa. Y después siempre he intentado hacerme mi viajecito al año.

 -Cuando estás de vacaciones, ¿descansas en casa o prefieres irte de viaje?

Preferiría viajar, pero cerca y de relax, y sobre todo no montar yo el viaje, Porque durante las grabaciones ya me dedico yo a montarlo. Pero como mi pareja no opina lo mismo, cae viaje donde ya he estado como Estambul o Bali. Y como ya he estado en estos destinos me tocaba hacer de guía. La verdad es que viajar con contactos en el destino es otro rollo, ya que te facilitan las cosas cuando llegas allí, como me sucedió en Bali que varios de los entrevistados durante el programa me ayudaron a organizar el viaje. 

-¿Durante los días que estáis de grabación en cada destino os da tiempo a hacer turismo?

Estamos una semana aproximadamente. Y prácticamente no ves nada, ya que haces jornadas de 14 horas de grabación. Te tomas una cervecita cuando acabas la jornada en sitios muy chulos pero nada de hacer turismo. El turismo es el propio trabajo. Te sirve para saber donde quieres volver o no.

 -¿Cuál ha sido tu mejor viaje?

De los 21 destinos donde he estado Bombay, Camerún, Groenlandia y Nueva Zelanda han sido los mejores. No solo por el lugar sino también por la gente. Y Groenlandia fue un regalo ya que venía de hacer varios programas en ciudades inabarcables de más de 10 millones de habitantes que son difíciles de grabar y me reservaron el de Groenlandia para que disfrutara un poco del paisaje. Y Bombay ha sido uno de los destinos que más me ha gustado porque era una ciudad a la que quería ir desde que vi la película “Slumdog Millionaire”.

 -¿Cuál es el destino más difícil a la hora de trabajar, donde hayáis tenido más problemas en las grabaciones?

Sin duda El Cairo. El otro día vi a las reporteras de diferentes televisiones españolas intentando hacer su trabajo en la plaza Tahrir y me acordé de lo mal que lo pasé yo. Y eso que yo fui en una época que nada tiene que ver con la que se ha vivido estos días. Pero es que allí hay mucha burocracia, tenías que pasar una mañana en cada sitio para conseguir permisos.

-¿Qué no puede faltar en tu maleta?

Tengo una gorra que me regaló mi pareja y que no falta en ninguno de mis viajes. Y luego mi ipod porque me toca dormir con algún cámara que ronca mucho y poniéndome música es la única manera que tengo de dormirme.

-¿Qué libro recomendarías para las horas de espera en el aeropuerto?

Tengo dos que me han dado grandes momentos. El último me lo devoré en el último viaje a Costa Rica. Es “Cosas que los nietos deberían saber” de Mark Everet componente del grupo musical Eels, y, por otra parte, un clásico: “Ébano” de Kapuscinsky. 

-¿Qué viaje tienes pendiente?

Hay dos destinos que haré seguro como Tokio y Chile, ya que son países que lo tienen todo.

 -¿Cuál ha sido la última escapada que has hecho?

En Gijón hace unos fines de semana hicimos la ruta del cantautor Nacho Vegas, y recorrimos todos los sitios que cita en sus canciones.

-¿Eres de los que cuando viaja se atreve con todo todo tipo de gastronomía o prefieres recurrir a la cocina internacional?

Normalmente lo intento probar todo, aunque sea por respeto. Pero al cuarto o quinto día, hay un momento donde tu estómago dice basta y no puedes arriesgar. No debes olvidar que estás trabajando y no puedes permitirte caer enfermo varios días.

 -¿Qué es lo más extraño que has comido en tus viajes?

Tuve que probar una rata de campo recién cazada por los pigmeos en medio de la selva de Camerún.

 -¿Y la comida que más te ha gustado?

Generalmente toda la de América Latina. Soy un enamorado de Guatemala y me encanta su gastronomía.

 -Y en Valencia de donde eres, recomiéndanos dónde ir a comer.

Sin duda, al mitiquísimo Llevant, donde hacen paellas a leña, en la playa de la Patacona.

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