PORTADA | Seamos honestos. Hay piscinas de verdad y otras que no deberían ni disfrutar de esa categoría. Nosotros somos más de las primeras. Y hoy vamos a hacer un recorrido por algunas de las que te vienen a la mente cuando oyes la palabra piscina, por aquellas que son la excusa perfecta para visitar un hotel, de las que «si me toca la lotería»… Éstas son las piscinas donde nos gustaría estar ahora mismo.
Los arrozales se ven desde la piscina del Viceroy Hotel en Bali (Indonesia).
Lujo indio en The Oberoi Udaivillas.
El Ladera Resort está en la isla de Santa Lucía.
Ir de safari a Sudáfrica pero sin renunciar al lujo, como en este campamento de Phinda Homestead.
En la Capadocia turca se encuentra el hotel Gamirasu y su impresionante piscina.
Una piscina dentro de una cueva encontrarás en uno de los hoteles Kaitikies de Santorini (Grecia).
La piscina del Rosebud Mayakoba está junto a las blancas arenas de la playa del Carmen, en la Riviera Maya mexicana.
El Radisson Blu Plaza Resort se encuentra en la playa tailandesa de Phuket.
El hotel Capella Pedregal está en Cabo San Lucas, México.
El Taj Exotica Resort & Spa está en las exclusivas islas Maldivas.
El Pacuare Jungle Lodge yace en plena jungla de Costa Rica.
El Hotel W Retreat and Spa de las islas Maldivas tiene unas terrazas de ensueño.
La piscina más grande del mundo se encuentra en San Alfonso del Mar (Chile).
El cielo estrellado en mitad del desierto es el plus del Hotel Rostock Ritz Desert Lodge (Namibia).
La piscina del Hotel Grand Barcelona (www.grandhotelcentral.com) tiene vistas sobre la ciudad condal.
Piscina del Gran Hotel Convento di Amalfi en la costa amalfitana de Italia.
Hay piscinas para disfrutar de románticas cenas, como la del Hotel The Sarojin Thailand (Khao Lak, Tailandia).
La piscina del hotel Perivolas de Santorini (Grecia) funde su azul con el del mar Egeo.
La piscina del hotel Elan de Dallas (EE.UU.) sobresale dos metros y medio de la fachada principal.
La piscina del hotel Marina Bay Sands es como un balcón entre rascacielos.
Las piscinas del hotel Ubud Hanging Gardens se funden con la naturaleza de la isla de Bali.