NAXOS, LA ISLA GRIEGA QUE SIEMPRE HAS SOÑADO
PORTADA | Es la más grande las islas cícladas de Grecia. Entre las turísticas Santorini y Mykonos se alza este pedazo de tierra llamado Naxos que aúna historia, un casco histórico encalado y playas de infarto en las que cada vaivén transparente de las olas te recuerda a Cerdeña o Formentera.
Llegar de la atestada Santorini y desembarcar a pocos metros del casco antiguo de Naxos es un lujo. De sencillez. Pero un lujo al fin y al cabo. Se acabó el hacer colas para ver puestas de sol. Aquí tenemos para nosotros solos (y algún que otro viajero despistado) un marco incomparable: el que forman los restos del templo de Apolo (siglo VI a.c.). Un portalón que, desde una pequeña península elevada, le pone límites físicos al azul del cielo o a la inmaculada capital de la isla, también conocida como Khora o Naxos.
Recorrer sus callejuelas es como hacerlo por una medina, en la que tan fácil es perderse como volver a la calle principal sin uno quererlo. Allí las tabernas con encanto, las tiendas de artesanías (donde parecen estar prohibidos los globalizados souvenirs) y la música que traspasa las terrazas se suceden en una inmersión de la Grecia que todos llevamos en la cabeza. Con turistas (no vamos a decir que hemos descubierto una isla intacta y genuina) pero con mucha gente local.
Y si nos enamora su ciudad, más lo hacen playas como la de Mikri Vigla. A 30 minutos de la capital por un camino de arena repleto de baches en los que la blanca arena, las inigualables aguas y una taberna con una cerveza Mythos nos espera. Así es la isla griega con la que todos hemos soñado alguna vez.
UN CASCO ANTIGUO INMACULADO | KHORA. Las tabernas y comercios se suceden en cada serpenteante callejón del casco antiguo de Khora, capital de Naxos.
EL PARAÍSO HECHO PLAYA| MIKRI VIGLA. A media hora en coche de la capital, se encuentra esta playa paradisíaca con una sencilla taberna a pie de arena.